Travesía Tabarca-Santa Pola

Dura, durísima se me hizo este año esta prueba de fondo que recorre a nado los seis kilómetros que separan la isla de Tabarca y la localidad de Santa Pola. Llegaba mucho más en forma que el año pasado pero con menos kilómetros nadados y sobretodo con un cuerpo agotado por las largas distancias que ya llevaba encima debido a la preparación de nuestro gran proyecto el GR11en11.

Este año no pensaba participar ya que el reto lo superé el año pasado, pero Vanesa tenía que conseguirlo y yo le propuse venir juntos para acabar de animarla.


Salimos a las 7:30 de la mañana y los dos primeros kilómetros me fueron de maravilla, estaba en tiempos de bajar la marca del año pasado y eso me daba fuerzas pero, a partir del kilómetro dos y medio estas desaparecieron. A partir de aquí ya todo sufrir, cada kilómetro me estaba costando más tiempo que los dos primeros juntos y las piernas estaban a punto de fallar de forma definitiva. Amago de calambres permanente que hacía que no pudiera forzar en absoluto la máquina y una línea infinita de boyas que no se acababa nunca… Por mi cabeza pasó de forma muy ligera la posibilidad de abandonar, pero yo no soy así y me puse a buscar motivos para seguir nadando (uno principal que me acompaña siempre). Además, la idea de abandonar en medio del mediterráneo no me parecía un plan muy apetecible, por lo que decidí poner la reductora e intentar alternar estilos (normal y perrete) para no quedarme tirado en el agua.

Conseguí llegar en 3h05' (media hora más que el año pasado) cabreado por no haber podido apretar más pero sobretodo muy contento conmigo mismo por haber sido capaz de mantenerme a flote y terminar la travesía.

Mención especial a la prueba que se marcó Vanesa terminando en 2h17' (no dudaba que lo ibas a hacer genial) y a mi cuñao Gerardo y mi hermano Pepe que también se atrevieron de nuevo con esta bonita travesía. ¡No hay nada que se nos ponga por delante amigos!

Cuando las piernas no funcionan es la cabeza la que tiene que trabajar y afortunadamente esta vez, la mía volvió a responder.

Quiero aprovechar para felicitar a la organización, y para dar las gracias a todos los voluntarios sin los que este tipo de eventos sería imposible. Enhorabuena al Club Natación Alone por ser capaz de sacar adelante esta prueba que se tenía que haber celebrado el día 5 pero que, dado el estado de la mar, fue imposible.

Fotos propias y del Google + de la organización